Nido

A este anillo lo llamé "Nido".

En el patio de mi casa hay varias parras, entre ellas forman un hermoso toldo frondoso que nos protege del sol y que a finales de febrero o principios de marzo nos bendice con el delicioso sabor de la uva de casa: con pepas y ollejos gruesos, regada con agua de limpia y sobre todo, un fruto protegido por un zorzal que ya lleva su buen tiempo entre nosotros.

Llegó un día cualquiera e instaló su nido cerca de la piscina, donde no le da la sombra que lo mantiene fresco mientras empolla sus huevos. Este nido que menciono no es el primero, antes hizo otros...todos en distintos lugares, en todos puso sus huevos y de todos nacieron zorzalitos que aprendierona volar a costalazos.

Inspirada en ese nido que ahora decora la parra de uva negra, salió esta maravilla de plata...porque debo reconocer, que me encantó como quedó.